El término apariencia puede significar manifestación engañosa de algo, por eso, a veces, decimos que las apariencias engañan. Pero inclusive en esta frase el término apariencia ante todo es la forma como se manifiesta, como se presenta, como percibimos algo. Otra cosa es que con posterioridad descubramos que esa manifestación es engañosa. En realidad, la apariencia no es la que engaña, sino la interpretación que hagamos de ella. Si alguien dice que ve al Sol moverse en el cielo y a la Tierra permanecer quieta, diremos que, en realidad, no es el Sol el que se mueve sino la Tierra. Parece que el Sol se mueve, pero, en realidad, no es así. Es como cuando vamos en tren y miramos al exterior, por momentos podemos tener la impresión de que el paisaje es el que se mueve y nosotros los que estamos quietos.
Podemos decir, de manera resumida, que la apariencia ha sido concebida de tres formas:
* Como el ser real de las cosas, en cuanto que estas se identifican con los aspectos que presentan.
* Como ocultación del ser de las cosas, pues tal ser está mas allá de lo que las cosas parecen.
* Como el camino para llegar a descubrir el ser real de las cosas, pues sólo a través de su apariencia podemos alcanzar su auténtico ser.
En nuestro tiempo, contamos con una forma de realidad desconocida para nuestros antepasados: la realidad generada por ordenador o realidad virtual (virtual reality). Realidad virtual, según el diccionario de la lengua, es una forma de existencia aparente y no real. En definitiva, en una realidad que no es real, que es pura apariencia engañosa.
Es de personas sensatas estar alertas ante todo aquello que nos engaña.
Algunos autores consideran que la realidad virtual crea un nuevo Umwelt (entorno), una realidad cocinada por el ordenador que puede llegar a provocar que acabemos olvidando cómo digerir la realidad cruda. En el límite, se puede llegar a considerar que la personalidad ficticia generada mediante un programa informático de "vida artificial" es más real que la que se posee en la vida que se vive fuera de ese mundo virtual. Así, hay quien llama a esa vida exterior al ordenador "vida basura".
Hay tres películas que reflexionan sobre realidad y apariencia: Desafío total (Total Recall), The Matrix y El show de Truman. En concreto, en las dos primeras se abordan las consecuencias futuras de este movimiento de indistinción entre lo real y lo simulado, lo físico y lo electrónico. En Total Recall (Desafío total en la versión española), una empresa del futuro está dedicada a grabar en el cerebro, por un módico precio, los recuerdos vividos de un viaje a lugares donde no se ha estado jamás, de tal forma que se incorpora a la conciencia una vivencia plena equivalente a la estancia en dichos lugares. En The Matrix un joven informático, Neo, entra en contacto con un misterioso personaje, Morfeo, que le mostrará qué es Matrix. Neo descubrirá que el mundo que conoce no es el mundo real, sino una simulación generada por ordenador.
En El show de Truman, también se plantea este problema clave de la historia de la filosofía: cómo distinguir lo que es real de lo que no lo es. Truman Burbank lleva la vida de un hombre corriente. En realidad, el universo que le rodea es el gigantesco plató de un programa de televisión cuyo protagonista es él y en el que todo su entorno constiutye el escenario de una vida artificial seguida por millones de espectadores. La serie comenzó el día que nació y desde entonces no ha dejado de emitirse las 24 horas del día durante más de 30 años. Debido a una serie de sucesos, Truman comenzará a dudar de la realidad en la que vive, e iniciará un camino de búsqueda hacia el conocimiento de la verdad. Descubrirá el engaño y luchará por su libertad.
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